La elección de una iluminación adecuada no solo influye en la estética de nuestros espacios, sino que también tiene un impacto significativo en nuestra productividad y bienestar.
Los dispositivos LED son altamente eficientes, consumen menos energía y tienen una mayor vida útil en comparación con las tecnologías anteriores de iluminación, lo que se traduce en un ahorro significativo a lo largo del tiempo.
Además, las luces LED ofrecen una mayor calidad de luz, reduciendo la fatiga ocular y mejorando la concentración.
En el hogar, una iluminación LED adecuada puede crear ambientes acogedores y versátiles. En la oficina, una iluminación bien planificada puede mejorar la productividad y el estado de ánimo de los empleados. En la industria, la iluminación LED es esencial para garantizar la seguridad y la eficiencia en los espacios de trabajo.
Una variedad de opciones en diferentes tonos de luz y potencias, perfectos para reemplazar los antiguos bombillos incandescentes y ahorrar energía en el hogar.
Estos elegantes dispositivos proporcionan una iluminación uniforme y de alta calidad, ideales para espacios comerciales y oficinas, aportando una estética moderna.
Aportan un toque decorativo y funcional, creando ambientes cálidos y agradables.
Perfectas para iluminar espacios enteros con eficiencia y estilo. Existe una amplia gama de diseños que se adaptan a la decoración de tu hogar u oficina.
Las lámparas led lineales entregan una luz brillante y uniforme, con ahorro energético y durabilidad excepcional.
Perfectas para la lectura, trabajo o agregar un toque decorativo, estas luminarias ofrecen versatilidad y comodidad en cualquier entorno.
Los tubos led pueden mejorar notablemente la iluminación de los espacios, brindando una claridad y calidad lumínica excepcional.
Los reflectores LED son una excelente opción para iluminación exterior, destacando áreas con una luz potente y enfocada. Ideal para jardines, patios, y espacios comerciales.
Con una iluminación suave y elegante, estas luces crean ambientes acogedores y mágicos durante las noches.
Con su diseño compacto y potente, son ideales para realzar elementos decorativos, obras de arte o cualquier área que desees destacar en tu hogar o punto de comercio.
Los faroles led son una solución de iluminación exterior excepcional, brindando una luz potente y duradera para calles, senderos y áreas públicas.
Su batería recargable y tecnología led de bajo consumo aseguran una iluminación fiable durante muchas horas.
Un LED es un dispositivo semiconductor que emite luz cuando la corriente eléctrica fluye a través de él.
La palabra LED proviene del inglés Light Emitting Diode, que en español traduce: Diodo Emisor de Luz.
El led ha revolucionado el mundo, no solo por entregar una luz blanca y fría con un consumo de energía realmente bajo, sino también por su aplicación en las telecomunicaciones, las cuales se sirven de leds láser para enviar grandes paquetes de datos a altas velocidades por medio de fibras ópticas.
Los leds también son usados para el almacenamiento de datos por medios ópticos como son los discos compactos (CD, DVD y BlueRay). Así mismo, la tecnología led ha hecho posible el desarrollo de pantallas compactas y livianas como son las pantallas de los teléfonos celulares, tablets, relojes inteligentes y otros dispositivos de visualización, que incluyen los llamados televisores de pantalla plana, ampliamente usados hoy en día.
Recientemente, el desarrollo de leds fabricados con materiales orgánicos, conocidos como OLED, está permitiendo el desarrollo de pantallas ultra delgadas, flexibles y con una gran fidelidad de color, las cuales tienen un sin número de aplicaciones, la más popular de ellas es en televisores y pantallas de computadora, así como en la decoración de superficies y la construcción de escenarios en el mundo del espectáculo. Pero, ¿cómo nació la tecnología led? Y ¿Quiénes la hicieron posible? Continúa leyendo y lo sabrás.
El origen de los LED se remonta a una piedra, el Carburo de Silicio. En el año de 1891 el químico estadounidense Edward Acheson estaba buscando un método para fabricar diamantes. Realiza una mezcla de carbono y arena y la lleva a un horno a altas temperaturas. No obtuvo un diamante, pero su descubrimiento lo hizo igual de rico.
Logró fabricar un nuevo mineral cristalino que llamó Carborundo, este nuevo mineral era casi tan duro como el diamante y mucho más económico de obtener. Consciente de su utilidad, Acheson fundó una compañía millonaria The carborundum company, la cual comenzó a producir papel de lija, piedras de amolar y discos de pulido, que a día de hoy todavía existe.
El carborundum tiene ciertas propiedades eléctricas muy interesantes. Cuando se le aplica un voltaje bajo se comporta como un aislante, pero a medida que se incrementa el voltaje y se sobrepasa cierto umbral, el carborundum se comporta como un conductor. Esto es lo que conocemos como un material semiconductor.
En 1907 el ingeniero británico Henry Round, quien quería mejorar la señal de las primeras radios, se dio cuenta de que cuando determinado voltaje era aplicado sobre el carborundum, este brillaba.
Sin saberlo, Round había creado el primer LED de la historia. Pero su descubrimiento no tuvo gran notoriedad para la época.
En 1922 el ingeniero soviético Oleg Lóssev, quien trabajaba como técnico de radio, se percató que el cristal utilizado para mejorar la señal brillaba con luz amarillenta, el cristal era el carborundum.
Lóssev quedó muy intrigado por este fenómeno y en los siguientes años investigó a fondo los secretos de esta misteriosa fuente de luz, escribiendo 16 artículos científicos en cuestión de cinco años.
Lóssev se dio cuenta de que el origen de la luz no tenía un origen térmico como la bombilla incandescente de Edison, es decir, el material no se calentaba, la luz era fría, se trataba de un nuevo fenómeno luminoso conocido como electroluminiscencia, es decir, luz emitida por electrones.
Lóssev era un genio y logro describir un sistema de comunicación mundial basado en la luz LED, pero desgraciadamente murió de hambre en el asedio de Leningrado y sus patentes no fueron implementadas.
En 1961 los científicos Robert Biard y Gary Pittman inventan el primer LED como lo conocemos hoy en día, formado por galio y arsénico capaz de emitir luz infrarroja, usado en los controles de mando a distancia.
Al año siguiente aparece el primer LED de luz visible, de color rojo, creado por Nick Holonyak, quien trabajaba en la General Electric, formado por un semiconductor de galio, arsénico y fósforo.
La producción de LEDs era realmente costosa, pero los científicos no se detuvieron ahí, se enfocaron en hacerlos más baratos y en crear más colores.
La aparición del led amarillo y el led verde, junto con una disminución de sus costos de fabricación, sería el inicio de la era del led.
Para entonces ya se contaban con leds rojos, amarillos y verdes que fueron introducidos rápidamente en los nuevos dispositivos electrónicos del mercado.
Sin embargo, aún faltaba el color quizá más importante: el led azul. Los científicos tardarían más de 30 años en fabricar el led azul.
En 1992 los científicos Isamu Akasaki, Hiroshi Amano, Shuji Nakamura presentaron el led azul, por lo cual los tres fueron recompensados con el premio Nobel de química del año 2014.
El led azul era fundamental, ya que a partir de él se podía crear luz blanca. La creación del led que emitía luz blanca significó un gran salto tecnológico en la iluminación, puesto que las bombillas incandescentes eran terriblemente ineficientes en cuanto a emisión de luz, al tiempo que la mayor parte de la energía consumida se perdía en calor.
En la actualidad existen básicamente 4 tipos de led:
Este fue el primer led disponible en el mercado. Su diseño consta de un diodo dentro de una carcasa de plástico duro transparente, del que sobresalen dos pines de conexión en paralelo.
Del color de esta carcasa dependerá la luz que emite el LED, el cual solo puede emitir luz de un solo color.
La forma de este led es cilíndrica con la parte superior redondeada. Por ser los primeros led disponibles no son muy eficientes lumínicamente.
El Led DIP era muy utilizado en pantallas exteriores debido a su alto grado de resistencia; sin embargo, era necesario combinar 3 chips (rojo, verde y azul) en un pixel.
A pesar de que hoy en día se siguen utilizando los led DIP, su baja eficiencia lumínica (4 Lúmenes por Led) respecto a los Led más recientes, ha restringido su uso como indicadores en diferentes productos electrónicos, electrodomésticos y en alumbrado navideño.
SMD (Surface Mounted Device) es un led encapsulado en una resina semirrígida soldada a la superficie del circuito.
Se suele colocar sobre circuitos impresos para crear módulos de varios leds.
Los led SMD son mucho más pequeños y eficientes que los originales led DIP y son una de las aplicaciones más comunes en productos de iluminación, a pesar de que la unión del chip a la placa genera altas temperaturas, por lo que no se recomienda para un funcionamiento continuado.
El desarrollo de los chips SMD significó un gran avance en la tecnología de los led, ya que se logró agrupar 3 diodos en un mismo chip.
Con la unión de los 3 colores primarios: rojo, verde y azul, no solo se consiguió generar luz blanca de manera directa, sino que con dicha combinación se consiguió también generar una gama de hasta 16 millones de colores diferentes.
Por otro lado, si se quiere emitir solo luz blanca, se usa un diodo que generalmente va montado en una estructura cuadrada o rectangular, y la emisión de la luz se obtiene a través de una tecnología bicromática, en la cual un led de color azul está encapsulado en una resina que contiene fósforo de color amarillo.
La densidad de la capa de fósforo determina la temperatura del color del led (fría o cálida).
Los led SMD son los más utilizados para iluminar, por lo que las empresas de iluminación trabajan conjuntamente con los fabricantes de las placas integradas para mejorar sus características tanto estéticas como de eficiencia.
Los chips SMD producen entre 60 y 80 lúmenes por vatio, un rendimiento considerablemente superior a los anteriores DIP.
Emiten luz unidireccional, pero al poderse distribuir por toda la superficie del soporte, es posible conseguir un ángulo de apertura de 360º.
Otra característica positiva es el CRI (Índice Reproducción Cromática) del 80% que posee, otorgando una reproducción fiel del color.
Los Led COB son uno de los últimos avances en el desarrollo de la iluminación Led.
Tienen un gran rendimiento lumínico, pudiendo superar los 120 lúmenes por vatio. Además, su diseño permite que el calor se disipe de forma eficiente, siendo el tipo de LED ideal para luminarias que deban permanecer encendidas durante muchas horas. Los Led COB se usan para iluminar industrias, en alumbrado público y en proyectores de luz. Los Led COB son muy resistentes y tienen una alta durabilidad.
Otra de sus aplicaciones es su uso en dispositivos pequeños como teléfonos móviles y cámaras fotográficas, ya que generan una alta cantidad de lúmenes con una cantidad de energía muy pequeña, ideal para los flashes de estos dispositivos.
Entre sus ventajas podemos contar su capacidad para soportar los cambios de voltaje en la corriente eléctrica y su capacidad de ofrecer un ángulo de apertura de hasta 160º, emitiendo una luz multi-direccional.
Su diseño se basa en la inclusión de varios diodos LED en el mismo encapsulado. Se insertan varios chips recubiertos por silicón con fosforo de color amarillo en un sustrato para conformar un módulo único, que al no ser empaquetados como el SMD, se pueden distribuir de tal forma que no requieran mucho espacio, lo que reduce hasta en un 20% los costes de fabricación respecto a los chips SMD.
Los módulos COB utilizan un circuito con dos contactos para alimentar los chips que aloja, por lo que solo se puede obtener una temperatura de color o una gama de colores limitada pero con un gran rendimiento eléctrico y lumínico.